Nuestra Iglesia en la Guerra
El 6 de agosto de 1936 fueron incendiadas las imágenes de la Iglesia Parroquial y de las tres Emitas. Aunque se citan a “las turbas Rojas” (en el informe hecho por el Ayuntamiento en la posguerra) se acusó finalmente sólo a siete personas, siendo todas ellas encarceladas en la posguerra.
(En el documento original aparecen los siete detenidos, pero he decidido no incluirlos)
…Todo lo que había de sagrado: ornamentos, casullas, libros, lo sacaron y lo quemaron. Hicieron una “garbera” más alta que yo que sé; había una Virgen hecha con madera de ciprés que era de la escuela de Salzillo, La Purísima, que era una preciosidad. Todo lo quemaron y destrozaron. Francisco Ribera
…¡Quemaron todos los Santos! A la Soledad, como llevaba el manto de tela, le prendieron fuego y ardió enseguida, pero no la imagen, pues como era de madera buena les costó… El Señor de la Cama lo rompieron a martillazos y estuvo ardiendo durante toda la noche ¡Parecía el pueblo el infierno! Encendieron unos palos que hacían de antorchas e iban por el Paseo gritando: -Que mueran los fascistas. Las llamas casi subían más arriba de las casas. Amaneció un Paseo de palos quemados. ¡Nunca lo podré olvidar!
Josefa Andréu
…Estábamos durmiendo cuando una noche oímos un ruido muy grande, creíamos que había sido un terremoto. Al día siguiente nos enteramos de que habían tirado las campanas. Al Señor de la Cama lo trajeron una noche a la puerta del Café de Alejo, que estaba junto a mi casa, y gritaban: “Señor, si tienes…baja a tomar café”. Y nosotros “acostaicos”, “asustaicos”, con la luz apagada…
Rosario Gómez
Testimonios aparecidos en “Almoradí en la memoria” de Antonio González Lucas
Texto y fotos sacados de: http://almoradi1829.blogspot.com.es/2010/01/nuestra-iglesia-en-la-guerra.html
(En el documento original aparecen los siete detenidos, pero he decidido no incluirlos)
…Todo lo que había de sagrado: ornamentos, casullas, libros, lo sacaron y lo quemaron. Hicieron una “garbera” más alta que yo que sé; había una Virgen hecha con madera de ciprés que era de la escuela de Salzillo, La Purísima, que era una preciosidad. Todo lo quemaron y destrozaron. Francisco Ribera
…¡Quemaron todos los Santos! A la Soledad, como llevaba el manto de tela, le prendieron fuego y ardió enseguida, pero no la imagen, pues como era de madera buena les costó… El Señor de la Cama lo rompieron a martillazos y estuvo ardiendo durante toda la noche ¡Parecía el pueblo el infierno! Encendieron unos palos que hacían de antorchas e iban por el Paseo gritando: -Que mueran los fascistas. Las llamas casi subían más arriba de las casas. Amaneció un Paseo de palos quemados. ¡Nunca lo podré olvidar!
Josefa Andréu
…Estábamos durmiendo cuando una noche oímos un ruido muy grande, creíamos que había sido un terremoto. Al día siguiente nos enteramos de que habían tirado las campanas. Al Señor de la Cama lo trajeron una noche a la puerta del Café de Alejo, que estaba junto a mi casa, y gritaban: “Señor, si tienes…baja a tomar café”. Y nosotros “acostaicos”, “asustaicos”, con la luz apagada…
Rosario Gómez
Testimonios aparecidos en “Almoradí en la memoria” de Antonio González Lucas
…Todo lo que había de sagrado: ornamentos, casullas, libros, lo sacaron y lo quemaron. Hicieron una “garbera” más alta que yo que sé; había una Virgen hecha con madera de ciprés que era de la escuela de Salzillo, La Purísima, que era una preciosidad. Todo lo quemaron y destrozaron. Francisco Ribera
…¡Quemaron todos los Santos! A la Soledad, como llevaba el manto de tela, le prendieron fuego y ardió enseguida, pero no la imagen, pues como era de madera buena les costó… El Señor de la Cama lo rompieron a martillazos y estuvo ardiendo durante toda la noche ¡Parecía el pueblo el infierno! Encendieron unos palos que hacían de antorchas e iban por el Paseo gritando: -Que mueran los fascistas. Las llamas casi subían más arriba de las casas. Amaneció un Paseo de palos quemados. ¡Nunca lo podré olvidar!
Josefa Andréu
…Estábamos durmiendo cuando una noche oímos un ruido muy grande, creíamos que había sido un terremoto. Al día siguiente nos enteramos de que habían tirado las campanas. Al Señor de la Cama lo trajeron una noche a la puerta del Café de Alejo, que estaba junto a mi casa, y gritaban: “Señor, si tienes…baja a tomar café”. Y nosotros “acostaicos”, “asustaicos”, con la luz apagada…
Rosario Gómez
Testimonios aparecidos en “Almoradí en la memoria” de Antonio González Lucas
Texto y fotos sacados de: http://almoradi1829.blogspot.com.es/2010/01/nuestra-iglesia-en-la-guerra.html
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