ALICANTE RINDE HOMENAJE A LAS VÍCTIMAS DEL BOMBARDEO FASCISTA DE MAYO DE 1938
Oscar M. Fernández / @omanteca
La Plaza del 25 de Mayo era escenario este sábado de un tan cuidado como nutrido homenaje a las víctimas del bombardeo fascista de mayo de 1938 que causó casi cuatrocientas víctimas mortales y un millar de heridos.
Organizado por el Ayuntamiento de Alicante, al mismo ha asistido el equipo de gobierno con el alcalde, Gabriel Echávarri al frente y la Generalitat representada por la vicepresidenta, Mónoca Oltra, la consellera de Justicia, Gobernación y Reformas Democráticas, Gabriela Bravo, el conseller de Transparencia, Responsabilidad Social, Participación y Cooperación, Manuel Alcaraz y el cónsul honorario de Italia en Alicante, Danilo Angelini además de representantes de diferentes colectivos como la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica de Alicante y cientos de ciudadanos.
A las doce del mediodía en la Plaza 25 de Mayo, la megafonía del Mercado Central reproducía el sonido de las sirenas antiaéreas y el impacto del centenar de bombas que desde su base en Baleares la aviación fascista italiana descargó sobre el casco urbano en un acción calificada como ‘ataque deliberado a una zona civil’ por una comisión internacional.
‘MASACRE IGNOMINIOSA’
Gabriel Echávarri agradecía la presencia y apoyo de todos los presentes, administración autonómica y sociedad civil, resaltando la labor de la Comisión Cívica para la Recuperación de la Memoria Histórica y pedía ‘perdón en nombre del Ayuntamiento por lo que este no hizo cuando debía haberlo hecho’.
Por su parte, el vicealcalde Miguel Ángel Pavón y la concejal de Memoria Histórica, María José Espuch tenían también palabras de recuerdo para las víctimas: ‘la memoria de la Guerra Civil se condensa hoy aquí en el recuerdo de la masacre del Mercado central, como reconocimiento a unas personas cuyo único delito era tratar de sobrevivir en medio de la dureza de la guerra’, decía Espuch.
‘Hacer memoria es hacer justicia. No es recordar para la revancha, el odio o la confrontación, es hacer memoria para la restitución de la dignidad de las personas que dieron su vida en nuestra ciudad por la defensa de las libertades y de la democracia’, señalaba la edil de Memoria Histórica.
Por su parte, Mónica Oltra, se refería al papel de Alicante como ‘ciudad de retaguardia’ durante la Guerra Civil y al bombardeo del Mercado Central que ha calificado ‘como una de las masacres más ignominiosas de toda la Guerra’.
La vicepresidenta mostraba la disposición del Consell a apoyar la declaración como Bien de Interés Cultural del proyecto de Alicante Ciudad de Memoria porque ‘es un lugar histórico, de referencia para la memoria colectiva, que está presente en el recuerdo de mucha gente, pero que también está presente en lugares como el Mercado, el Puerto, el Campo de los Almendros, o el conjunto de los refugios de la ciudad’.
Oltra aludía al bombardeo de Guernica para señalar que mientras éste pasó a la memoria colectiva ‘el bombardeo del Mercado Central pasó a la memoria universal de la desmemoria, las personas que murieron aquí sufrieron una doble muerte: la física y la muerte del olvido’.
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