Origen y formación
La 109ª Brigada Mixta se formó durante la primavera de 1937 en Villena (Alicante) con reclutas de las quintas de 1935, 1934, 1933 y 1932, la inmensa mayoría de procedencia mediterránea: alicantinos, murcianos, valencianos y albaceteños. Políticamente era una unidad de influencia comunista. Su primer jefe fue el teniente coronel Antonio Gil Otero, que el 18 de julio de 1936, era comandante mayor del Regimiento Albuera nº 16 de Lérida (D.O. Mº Guerra nº 68, 19 marzo 1937). Tras ser destinado al Ejército del Este, ocupó su puesto como comandante de la Brigada, en abril, el mayor de Infantería, Luis Pedreño Ramírez (D.O. Mº Guerra nº 88, 12 abril 1937) que, al estallar la guerra, residía en Alcoy como capitán retirado por la Ley de Azaña.
Vista actual del colegio de los Salesianos de Villena (Alicante).
El día 20 de marzo de 1937, a las dos de la madrugada, se produjo la primera llegada a Villena, de la tropa que formaba el 433º Batallón de la 109ª Brigada Mixta, procedente de la Caja de reclutas de Albacete, siendo recibida y alojada, en el cuartel que se había habilitado en el recinto de los Salesianos, por el teniente Carlos Poblador y el comisario de la Brigada, Ernesto Herrero Falagan. Fue organizado con seis compañías: 1ª, 2ª, 3ª, 4ª, la de Ametralladoras y la de Eventualidades. También había una sección de especialidades donde estaban agrupados los hombres con oficio. Al día siguiente se incorporaron procedentes de la localidad de Villarrobledo (Albacete), los sargentos y cabos instructores que se iban a ocupar de adiestrar a la tropa. Unos días más tarde también se incorporaron el comisario del Batallón, Ricardo Charlan Bravo y el capitán jefe del mismo, Julio Lobo Echemendia. Junto a ellos los tenientes Francisco Pérez Valles, Jesús Rives Martínez y Dionisio Hernández Alba. Entre otros supuestos tácticos que realizó la unidad como aprendizaje militar, preparó la organización defensiva del pueblo Campo de Mirra. También una marcha de maniobra con objetivo táctico, por la carretera de Villena a El Salse (Beneixama).
Luis Pedreño, mayor de infantería. Fue el segundo jefe de la 109ª Brigada Mixta.
El 28 de marzo, en cumplimiento de cuanto disponía la Orden General de la Brigada, el teniente Juan Pedro Fernández del Campo, procedió a la organización del 436º Batallón, otros de los batallones de los cuatro que componían la Gran unidad, trasladándose la fuerza desde la plaza de Villena, a la de Novelda, donde quedó de servicio de guarnición. Como comisario accidental del Batallón lo acompañaba Francisco Véliz. Realizaba marchas de resistencia y velocidad dentro de su programa de instrucción desde la carretera de Novelda a Elche, hasta las proximidades de Canax o hasta Santa Bárbara. Otro día, la misión de su simulacro consistió en la organización ofensiva del pueblo de Baños de Osito contra el enemigo, que se encontraba en Ventas de Agost. Volvió a repetir otra marcha de 30 kilómetros, desde Novelda hasta Elche.
Durante el mes de abril, los hombres del 434º Batallón formado en Sax, al mando de su capitán Timoteo Reboiro Giménez, se incorporaron a la localidad de Villena, donde se unieron a las fuerzas del 433º Batallón. Componían el cuadro de oficiales del 434º, el capitán de la 1ª compañía, Manuel Prieto Méndez y los tenientes Bernardino Martínez Gómez y Modesto Calle Ortega. La 2ª compañía la formaban, su capitán José Marco Gil y el teniente Marcelino Torrado Felipe. La 3ª compañía el teniente comandante Cándido Lope Iranzo. La 4ª, su teniente comandante, Enrique López Mendía y Antonio González Amo como oficial. La de Ametralladoras, su teniente comandante Juan Canet Canet, y la Plana Mayor el teniente Cesáreo Cabañas Lizana. Ambas unidades, a las órdenes del mayor Agnelio Losada y del comisario del 433º Batallón, Santiago Aliques Bermúdez, embarcaron en la estación del ferrocarril en dirección a Cabeza del Buey (Badajoz) en el frente de extremeño, adonde llegaron el 28 de abril.
El constante movimiento de fuerzas republicanas en la cuenca del río Vinalopó, era vigilado por uno de los diversos servicios secretos de los que disponía, por aquel entonces, el Ejército franquista, el SIFNE. En un informe del 18 de abril de 1937, recoge que “En Villena, Novelda, Sax y Elda hay constantemente de 800 a 1000 hombres practicando la instrucción en cada uno y sirviendo de lugar de reposo para los que regresan del frente. En Novelda están terminando una fábrica de municiones que empezará a funcionar a fines de mes”.
Batallón de la 109ª Brigada Mixta desfilando por las calles de la ciudad
Mientras tanto, algunas compañías del 435º Batallón, actuaban realizando marchas por la carretera de Elda a Novelda, hasta las proximidades del puente del Vinalopó, y otras por la misma vía, hacia Monovar. También se dedicaban a la instrucción con armamento y correaje en orden de combate, al que debían acudir con su indumentaria color kaki, así como al manejo de armas. Realizaron otra marcha de 15 kilómetros, cuyo itinerario los conducía por la carretera hasta Chinorlet, Hondon y Soda, y que, en un supuesto táctico, trataban de ser ocupadas por el enemigo, del cual debían defenderlas desde las posiciones que ocupaban. A mediados del mes abril trasladaron esta unidad al Cantón Santa Bárbara, donde se le entregó a sus compañías los fusiles ametralladores y las ametralladoras a la compañía de las mismas. Hubieron de realizar otro supuesto táctico de la toma de Elda, en el cual el Batallón se suponía era el eje de ataque, estando concentrado en los Baños de Salineta, tratando de mantener el enlace con las demás unidades de la Brigada, regresando tras finalizar al Cantón. Completó su periodo de instrucción en tierras alicantinas, emprendiendo una marcha de 30 kilómetros de recorrido, con todo el equipo, cuyo itinerario comprendía desde Santa Bárbara al Hondón, regresando tras finalizarla al Cantón.
El mismo día en que los dos primeros batallones de la Brigada llegaron al frente de Extremadura, el 435º Batallón recibe la la orden de marcha por carretera con sus elementos a la estación de Sax, para embarcar en tren militar, haciéndose el transporte de todo el material en camiones. El embarque se hace sin novedad y se pernocta en Villena. A las 18.00 horas marchaba el tren con dirección a Cabeza del Buey (Badajoz), siendo el punto de salida Villena. El viaje se realizó durante la noche sin ninguna novedad.
Las fuerzas del 436º Batallón por su parte, en virtud de la orden de la Brigada, el 28 de abril salieron de la plaza de Novelda con dirección a Villena, al mando de su mayor jefe, Roberto Cereceda, embarcando en otro tren militar a las 17.00 horas, llegando a la citada plaza a las 20.00 horas, donde vivaqueó hasta las 14.00 horas del día 29, desde donde en tren militar emprendió la marcha a Cabeza del Buey (Badajoz), llegando el día 30 de dicho mes a la citada ciudad, donde quedó de servicio de instrucción y guarnición.
Archivo General Militar de Avila (AGMAv.), Zona Roja (ZR). “Diario de Operaciones: del 433 Batallón de esta Brigada [109].- Marzo a julio 1937”. Armario (A)76 / Legajo (L)1236 / Carpeta (C)1 / Documento (D)1.
Foto de Joaquín Carrión
